La importancia de estas actividades que unen y fortalecen a los grupos. Una muy linda historia que merece ser contada.
Las chicas de la B se concentraron la noche del viernes 12 antes del partido con Monte Grande. "La concentración" se empezó a palpitar durante la semana, cuando las chicas comenzaron la organización: dónde dormir, qué comer y quién era responsable de cada cosa. El viernes, las del equipo que viven en el centro, partieron todas juntas, en la Combi de Fernando, rumbo a Villa de Mayo donde la familia Carabassa las esperaba y recibía. Las 14 jugadoras (sólo faltó Emi Taliercio) llegaron equipadas con bolsas de dormir, frazadas, bebidas, snaks y "algunos cuantos" caramelos, como para equipar un kiosko y así, usurparon el quincho.